La estética de las cosas, sus apariencias, son otro ejemplo sin soluciones exactas con las que trabajan los diseñadores.
Cuando miras un paisaje, muchos exteriores se crean de manera diferente en el mundo y todos dan otra perspectiva.
La arquitectura moderna no es lo mismo que la arquitectura contemporánea y ambas están elaboradas por especialistas y su estética es muy diferente. En ambos casos, los diseñadores se encargan de trazar cada línea, cada curva, encontrar la posición correcta para cada elemento, plantas. Eligieron materiales pero todos toman decisiones diferentes y todos funcionan de manera diferente.
Los diseñadores estudian la estética y la moldean mejor con el tiempo. Se inspiran en su vida diaria y juegan con su creatividad para hacer que esos paisajes se conviertan en exteriores únicos y emocionales.
En exteriores bien diseñados, creo en la posibilidad de trabajar con los 5 sentidos del cuerpo:
- Vista: con las diferentes formas y curvas
- Sonido: Con aguas de escorrentía de fuentes y piscinas
- Olor: Con las plantas que rodean el patio trasero.
- Tacto: con los diferentes tipos de materiales que utilizamos
- Sabor: mientras disfruta de sus exteriores, comiendo y bebiendo con amigos y familiares.
Esto es crucial para que un humano disfrute y cree recuerdos, especialmente hoy en día, ya que tienden a apreciar las cosas mejores y les gusta la comodidad extrema. Hoy en día, hay más posibilidades de encontrar inspiración a nuestro alrededor, pero aún se vuelve desafiante a la hora de abordar la concepción de un proyecto. Encuentro la mayor parte de mis inspiraciones en revistas, libros, Internet y las personas que conozco porque me enseñan un punto de vista diferente.